Undívagas

Undívagas en mi mente como la mar,
y el sol  de ello es testigo.
Undívagas en mi cuerpo, a cualquier
hora del día y tal es así que las noches
serenas y cálidas las asemejo contigo.

Undívagas mi mente, hasta tal punto
que me muero, mueren mis sentidos.

A veces yo undívago e intento hacerlo
sobre tu ser, más me es imposible hacerlo
como lo haces tú.

Undivágame  siempre, siempre que quieras.
Hazlo siempre, no dejes de hacerlo pues así
Siento yo que vivo undivagándome tú.

Necesito de ti, de tu cuerpo próvido, de tus manos,
de tu alma próvida, de tu incansable belleza,
undívaga en mi, hazlo toda la eternidad, para sentirme
joven, querido, amado y nunca muerto.

Comentarios

Entradas populares de este blog